Cuestionario sobre el Sistema Nervioso: ¿Cuánto sabes? ¡Haz la prueba!

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Cuando hablamos del sistema nervioso, nos referimos al conjunto de estructuras y órganos que permiten la transmisión de diversas señales, que parten y llegan a las distintas partes del cuerpo y hacen posible la coordinación de las acciones y funciones corporales, ya sean voluntarias o involuntarias, independientemente de que sean físicas o psicológicas. Lo que constituye el sistema nervioso se divide en el cerebro, la médula espinal, todos los órganos de los sentidos y todos los nervios que ayudan a la comunicación que se produce entre los órganos mencionados y las demás partes del cuerpo. El interior del sistema nervioso es, por supuesto, extremadamente complejo, y se caracteriza por un sistema nervioso central y un sistema nervioso periférico, que a su vez se subdividen en distintos componentes a los que pertenecen determinadas especificidades. La información procedente de todo el cuerpo y del entorno exterior se sintetiza y procesa especialmente en la médula espinal y el cerebro, donde luego se planifican y envían las reacciones adecuadas. Por ejemplo, las responsabilidades del cerebro incluyen las funciones del pensamiento, la memoria, la capacidad de movimiento, la comprensión, el lenguaje, pero también los movimientos voluntarios e involuntarios que se realizan. Como cuando pones la mano sobre una llama encendida y, al percibir el posible peligro para tu cuerpo, la retiras sin darte cuenta, aquí el cerebro ha realizado su tarea. El cerebro tiene responsabilidades vitales para el ser humano, como regular los latidos del corazón o la respiración. Todo suena muy complejo, pero en realidad, gracias al sistema nervioso, todo es automático y sencillo, casi surrealista. Muchas enfermedades degenerativas afectan al sistema nervioso, porque al desgastar el sistema nervioso, se daña implícitamente la salud mental y física de la persona, por ejemplo al describir la enfermedad de Parkinson. Por tanto, el sistema nervioso no sólo es fundamental para el funcionamiento de todo ser humano, sino que también necesita cuidados y estimulación constantes para permitir un mantenimiento adecuado.