Test de verificación de la Revolución Francesa: ¡Haz la prueba!

Test de verificación de la Revolución Francesa: ponte a prueba y comprueba tus conocimientos sobre este acontecimiento que cambió el curso de la historia mundial. ¡Haz el test!

Este es el test perfecto para comprobar tus conocimientos sobre los acontecimientos de la Revolución Francesa. Gracias a las preguntas del test tendrás la oportunidad de ponerte a prueba y quizás aprender algo nuevo sobre este acontecimiento fundamental de la historia. Antes de 1789, Francia atravesaba un periodo de gran crisis financiera. Había una gran disparidad entre el estilo de vida de los ricos y la burguesía y el de los pobres, que constituían el 96% de la población y estaban reducidos a la inanición. Así pues, se despertó una gran indignación por el estilo de vida del rey, Luis XVI, cuya corte no sólo era un símbolo de prestigio, sino también un centro de diversión. En mayo de 1789 se convocaron los Estados Generales en los que se dividieron las tres clases en que se dividía la sociedad francesa: la nobleza, el clero y el tercer estado (la burguesía). Aunque el tercer estado tenía el mayor número de miembros, le era imposible hacer valer sus opiniones frente a los otros dos órdenes, que compartían los mismos privilegios. El 17 de junio, el Tercer Estado se reunió de forma independiente y fundó la Asamblea Nacional. Algunos miembros del Clero y de la Nobleza se unieron a su causa, y el 27 de junio, Luis XVI se vio obligado a absorber los tres órdenes en una nueva Asamblea Constituyente. Pero fueron los disturbios que estallaron en las calles los que marcaron la diferencia en Francia: mientras los Estados Generales se reunían en Versalles, estallaron los primeros episodios de violencia en las calles de París. Fueron estos episodios los que desencadenaron la Revolución Francesa. En el punto álgido de esta tensión, el 14 de julio de 1789, los amotinados asaltaron la Bastilla, una fortaleza utilizada como prisión. El objetivo, sin embargo, no era liberar a los prisioneros, sino equiparse con armas y municiones. Para muchos estudiosos, éste es el acontecimiento que marca el inicio de la Revolución. Cuando el clima de tensión llega al campo, los campesinos también se levantan contra la explotación de los terratenientes. Muchos nobles se ven obligados a huir del campo, y la Asamblea Constituyente reacciona aboliendo el feudalismo. Con la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en 1789 y la adopción de una Constitución en 1791, Francia deja de ser una monarquía absoluta y se convierte en una Monarquía Constitucional. Pero los ideales de libertad e igualdad empujan el cambio más allá: la monarquía no es compatible con los nuevos valores de libertad, y los levantamientos revolucionarios no cesarán hasta 1792, cuando la monarquía es abolida y se proclama finalmente la República Francesa.