Test de Stranger Things temporada 2. Con este test descubrirás cuánto recuerdas de la segunda temporada de Stranger Things: ¡ponte a prueba!
Aquí tienes el test de Stranger Things sobre la segunda temporada. Con este test descubrirás cuánto recuerdas de la segunda temporada de Stranger Things: ¡ponte a prueba!
Una secuela o segunda temporada de una serie de televisión fantástica, como en este caso, tiene dos objetivos principales: ampliar la mitología y profundizar en lo que ya conocíamos. La segunda de Stranger Things también tiene estos objetivos. En la ampliación de la mitología aprendemos con seguridad que Eleven no es la única con poderes. No sólo hay otras personas dotadas como ella, sino que el inframundo alberga otras desgracias que los protagonistas no podían imaginar. En cuanto a la profundización del material narrativo de la primera cosecha, Stranger Things opta por hacernos reflexionar sobre los traumas del pasado.
Si la ampliación de la mitología es interesante pero no está bien construida, la profundización en muchos personajes funciona muy bien: Steve es el ejemplo emblemático. En él podemos discernir una evolución gradual de matón/chico malo a un personaje más polifacético y menos tóxico de lo que parece. Esta evolución será aún más evidente en la tercera temporada. Por otro lado, quien tiene un camino aún más importante es Eleven, que de comprimaro mágico salido de E.T. de Spielberg, se convertirá en una niña cada vez más segura de lo que quiere: amigos, familia, amor y una vida más normal.
Por supuesto, para quienes estén familiarizados con el cine de los 80, muchos giros pueden ser predecibles, pero la estructura episódica tiene un buen equilibrio en el manejo de la anticipación y las revelaciones. Además, una vez más, el citarismo de la serie está realmente estudiado, aunque a menudo puede parecer empalagoso y forzado. El mundo de los años 80 es completamente diferente del presente en el que nos encontramos, pero la escritura sabe exactamente cómo trabajar en dinámicas que seguimos viviendo. Una de ellas es el choque generacional. En la segunda temporada de Stranger Things este aspecto es aún más pronunciado, ya que el grupo de personajes se acerca a la edad adulta o a la adolescencia. Todo esto sucede porque los hermanos Duffer conocen el público objetivo al que pretenden llegar.